Emilio es una pieza artesanal que se distingue por sus formas orgánicas. Este aplique de pared está elaborado con barro blanco chamotado, cocido a altas temperaturas para lograr una mayor resistencia. Precisamente, su elaboración artesanal lo convierte en un producto totalmente único: cada pieza cuenta con sus propias hendiduras y formas, ya que se trabaja sin moldes.
Su acabado suave en color crudo combina con la textura natural y rugosa del barro, creando un efecto sensorial de lo más placentero. Utiliza este aplique como luz principal o como complemento de iluminación en diferentes áreas, como el pasillo o la cama. También puedes ubicarlo en exteriores cubiertos y dar a tu terraza un toque de artesanía.
Emilio se produce artesanalmente desde el taller de Paula y su equipo, ubicado en Barcelona.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.